-y de otras personas felices con su matrimonio-
a un hijo que se va a casar:
- Recuerda que amar a alguien es desearle lo mejor; deséense lo mejor siempre.
- No olvides que estás enamorado. Bésala en el ascensor, tómala de la mano en el cine y no te canses de decirle que es hermosa.
- Nunca hables mal de su familia ni de sus amigos, y menos aún de los que no te agradan.
- Escúchense. Cuando cometas una falta, ofrécele disculpas; cuando tengas la razón, guarda silencio.
- Nunca se ofendan ni se critiquen delante de otros; procuren no hacerlo tampoco al estar a solas.
- No griten cuando discutan; cálmense y traten de arreglar las cosas hablando en voz baja.
- Los días en que no se soporten, recuerden que se aman.
No hay comentarios:
Publicar un comentario